La reciente Reunión Mundial de Líderes sobre la Mujer 2025 en Pekín, dirigida por el presidente Xi Jinping, marcó un momento decisivo en la trayectoria de China hacia el empoderamiento de la mujer. El evento, que coincidió con el 30.º aniversario de la Cuarta Conferencia Mundial sobre la Mujer de 1995, reafirmó el firme compromiso de China con la igualdad de género, el desarrollo compartido y la cooperación global.
En su discurso inaugural, el presidente Xi subrayó que «las mujeres realmente sostienen la mitad del cielo» en la modernización de China y el progreso global. Enfatizó que el desarrollo de las mujeres no solo se trata del empoderamiento personal, sino también de la armonía familiar, la estabilidad social y la prosperidad nacional. Su mensaje transmitió orgullo por los logros de las mujeres chinas y una visión de su papel aún más importante en la construcción del futuro.
De la tradición a la transformación
Históricamente, la sociedad china estuvo profundamente influenciada por las tradiciones confucianas, que enfatizaban las virtudes de las mujeres como «buenas esposas y madres sabias». Los roles de las mujeres se limitaban en gran medida a las responsabilidades domésticas y los deberes filiales, con acceso limitado a la educación o la participación en la vida pública.
Sin embargo, el cambio siempre se gestaba bajo la superficie. Desde las costumbres progresistas de algunos grupos étnicos hasta los movimientos reformistas de finales de la era Qing y la era republicana, poco a poco se iban sentando las bases de la igualdad de género.
El establecimiento de la República Popular China en 1949 trajo consigo una transformación decisiva. La famosa declaración del presidente Mao Zedong: «Las mujeres sostienen la mitad del cielo» no fue mera retórica, sino un compromiso nacional. Las mujeres se incorporaron al mercado laboral, contribuyeron a la producción agrícola e industrial y participaron en la construcción de una nueva sociedad socialista.
Con la política de reforma y apertura de finales de la década de 1970, las oportunidades para las mujeres se multiplicaron. El acceso a la educación, la formación profesional y el empleo se amplió drásticamente. Las mujeres se hicieron visibles en todos los sectores —académico, político, empresarial y científico—, marcando el inicio de una era moderna de empoderamiento.
China moderna: las mujeres lideran el camino
En la China actual, las mujeres son fundamentales para el desarrollo nacional y el progreso social. Según estadísticas oficiales, las mujeres representan más del 43 % de la fuerza laboral nacional, más de la mitad de los fundadores de startups de internet y la mayoría de los medallistas olímpicos de China en los últimos años. Estas cifras reflejan el énfasis del país en la inclusión y la oportunidad.
El Plan de Desarrollo de la Mujer de China (2021-2030) establece objetivos concretos para mejorar la participación de las mujeres en la vida económica, política, cultural y social. Hace hincapié en el acceso a una educación de calidad, la protección de los derechos de las mujeres en el ámbito laboral y la promoción del liderazgo femenino en puestos de decisión.
En las empresas de todo el país, las mujeres representan ahora el 37,7% de los miembros de los consejos de administración, el 41,9% de los consejos de supervisión y el 34,2% de los representantes en los congresos de los trabajadores, lo que muestra un progreso notable desde 2012. La representación de las mujeres en el poder judicial también ha aumentado, con un 42,3% de los jueces, un 43,8% de los fiscales y más de la mitad de todos los jurados siendo mujeres.
La visión del presidente Xi para el desarrollo de las mujeres
El liderazgo del presidente Xi ha desempeñado un papel fundamental en el impulso del empoderamiento de las mujeres como prioridad nacional y mundial. En la reunión de Beijing, propuso cuatro iniciativas clave para acelerar el desarrollo integral de las mujeres:
- Crear un entorno propicio para el crecimiento de las mujeres a través de una mejor educación, atención sanitaria y servicios sociales.
- Fortalecer el impulso hacia un desarrollo de alta calidad, garantizando la participación igualitaria de las mujeres en la economía digital, verde e impulsada por la innovación.
- Mejorar los sistemas de gobernanza para proteger mejor los derechos y las oportunidades de las mujeres.
- Fomentar la cooperación mundial para el empoderamiento de las mujeres mediante asociaciones internacionales y la colaboración Sur-Sur.
El presidente Xi también anunció un conjunto de iniciativas históricas:
US$10 millones en nuevas contribuciones a ONU Mujeres;
100 millones de dólares del Fondo de Cooperación Sur-Sur de China para proyectos de desarrollo de mujeres y niñas;
1.000 programas de subsistencia “pequeños y hermosos” que benefician a mujeres y familias;
Programas de capacitación e intercambio para 50.000 mujeres durante los próximos cinco años; y
El establecimiento de un Centro Global para el Desarrollo de Capacidades de las Mujeres en China.
Estos compromisos demuestran la disposición de China a convertir los ideales en acciones prácticas, tanto en el país como en el extranjero.
Contribuciones de las mujeres a la modernización de China
Las mujeres chinas participan activamente y son innovadoras en todos los sectores. En la economía digital, han emergido como emprendedoras tecnológicas y líderes de negocios en línea. En la revitalización rural, están contribuyendo a la transformación de la agricultura mediante el comercio electrónico y el liderazgo cooperativo. En ciencia y tecnología, las investigadoras están abriendo nuevos caminos en campos que abarcan desde la inteligencia artificial hasta las ciencias ambientales.
En el ámbito cultural, las mujeres también son creadoras destacadas en los medios de comunicación, las artes y la literatura. Para 2023, más de 456.000 mujeres trabajaban en la industria de los medios de comunicación, lo que representaba el 43% de la fuerza laboral de ese sector. En el desarrollo comunitario, las mujeres desempeñan un papel vital en la gobernanza comunitaria, el voluntariado y los programas de apoyo familiar, fortaleciendo el tejido social de la China moderna.
Estas contribuciones ilustran que las mujeres no son simplemente beneficiarias del desarrollo: son cocreadoras del rejuvenecimiento nacional de China.
El modelo chino: igualdad, armonía y progreso
El enfoque chino para el empoderamiento de las mujeres combina la igualdad con la armonía, integrando el avance de género con el bienestar familiar y social. Este modelo es típicamente chino: no busca la confrontación entre géneros, sino que promueve el equilibrio, el respeto mutuo y el progreso colectivo.
La inversión continua del gobierno en educación, atención médica, apoyo maternal y derechos laborales garantiza que las mujeres puedan prosperar, conciliando sus aspiraciones profesionales y personales. Este modelo holístico ha fortalecido a las familias, las comunidades y al país en general.
El éxito de China también tiene relevancia global. A través de sus programas de cooperación internacional, iniciativas de capacitación y plataformas multilaterales, China se ha posicionado como socio y contribuyente al movimiento mundial de mujeres, compartiendo su experiencia con países en desarrollo e impulsando un orden internacional más inclusivo.
Un futuro coherente y esperanzador
De cara al futuro, la trayectoria es clara. Se espera que las mujeres chinas desempeñen un papel aún más importante en los objetivos nacionales de modernización, innovación y cooperación global. El liderazgo del presidente Xi Jinping proporciona la orientación política y el aliento moral necesarios para sostener este progreso.
Su declaración de que «la felicidad de las familias, la armonía de la sociedad y el progreso de la nación dependen del desarrollo de las mujeres» resume la visión de China. Es un llamado no solo a seguir empoderando a las mujeres, sino también a reconocer su papel indispensable en la construcción del destino del país.
Sosteniendo la mitad del cielo y más
La evolución de la condición de la mujer en China, desde las tradiciones del pasado hasta el dinamismo del presente, se erige como uno de los grandes éxitos de la era moderna. Impulsadas por la política, inspiradas por el liderazgo y motivadas por un espíritu colectivo, las mujeres chinas avanzan con seguridad en todos los frentes.
Hoy en día, son científicas, emprendedoras, artistas, juezas y diplomáticas. Son constructoras de comunidades, innovadoras y defensoras de la paz. En todos los ámbitos de la vida nacional, las mujeres demuestran talento, integridad y liderazgo.
Mientras la visión del presidente Xi Jinping sigue guiando el camino de China, el progreso de las mujeres sigue siendo un elemento vital de la modernización integral del país. De hecho, en esta nueva era, las mujeres chinas no solo sostienen la mitad del cielo, sino que también contribuyen a construir un futuro más brillante, armonioso y próspero para todos.
Fuente GSRRA
Acerca del autor

Zamir Ahmed Awan
Prof. Ing. Zamir Ahmed Awan, Presidente Fundador de GSRRA, Sinólogo, Diplomático, Editor, Analista, Asesor, Consultor del Centro de Investigación para la Cooperación Económica y Comercial del Sur Global y Miembro No Residente del CCG.



